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Actualmente, ¿qué es lo que los clientes ven en primer lugar de tu hotel? ¿La recepción? ¿Las habitaciones? ¿Las zonas comunes y la piscina? Pues no. Lo primero que van a ver son las webs de hoteles. Digámoslo claro. Tu página web es tu carta de presentación. Así que, vamos a ser claros también, no puedes cometer ningún error de diseño ni de arquitectura de la información.

Si tus clientes ven que las webs de hoteles están desordenadas, contienen imágenes borrosas, que no se puede navegar con claridad, que son confusas, se harán una imagen de tu hotel que no va a ser nada beneficiosa para tus intereses, que no son otros que los de vender cuantas más habitaciones mejor. ¿O no estamos en lo cierto?

Entonces, dicho esto. ¿Qué es lo que debes tener en cuenta? Vamos a explicarlo de una manera sencilla:

1.      Actualizar las webs de hoteles

Si no has hecho ninguna actualización de tu sitio web es muy posible que ya tenga muchos errores. ¿Cuáles pueden ser?

  • Tener una página web que todavía no esté preparada para ser leída en todos los dispositivos móviles. Es decir que no es “mobile friendly” como se denomina en inglés. Y créenos que esto es un gran inconveniente cuando más de la mitad de las búsquedas que se realizan actualmente en la red son a través de teléfonos móviles y tablets. Estás perdiendo muchos clientes además de estar dando una imagen desfasada.
  • Que las webs de hoteles no tengan suficiente velocidad de carga porque el software que utilizas se ha quedado anticuado. Los internautas esperan que las páginas web a las que acceden carguen en menos de tres segundos. Si no lo consigues en este tiempo, tu cliente se irá en busca de la competencia. Consulta con tu informático y que averigüe si la velocidad de carga es la correcta.
  • Que la página web tenga una arquitectura de la información clara y coherente. Que el cliente encuentre inmediatamente lo que anda buscando. Hay que dirigirle de una manera directa. Los internautas no quieren perder tiempo investigando porque son conscientes de que tienen miles de ofertas. Y has de ser capaz de que esa primera vista vaya directamente hacia los botones de comprar y que se conviertan en una venta.

2.      Tener medios de pago seguros

Lo que le estás pidiendo a un cliente cuando entra a la página web de tu hotel es algo tan íntimo como que te confíe sus datos personales y sobre todo su tarjeta de crédito. Por eso debes ofrecer webs de hoteles seguras. Lo que tienes que hacer es instalar un certificado de seguridad para que los datos de tus clientes no puedan ser sustraídos. Desde enero de 2017 Google premia a las webs que lo han instalado.

Otra cosa que debes tener en cuenta cuando nos estamos refiriendo a pagar es que debes incorporar la mayoría de los sistemas de pago disponibles en el mercado. Por supuesto la tarjeta de crédito, pero también Paypal, transferencia y si es posible el contra reembolso.

3.      Poner comentarios de otros clientes muy visibles

Los clientes llaman a los clientes. Y los clientes leen las opiniones de otros que ya han estado en tu establecimiento. Es un grave error no tener una sección de comentarios donde los antiguos huéspedes hablen de las bondades de tu hotel. Es una manera excelente de animarles  a hacer su reserva. Lo más conveniente es poner las opiniones de otros clientes en la página de inicio, bien visibles.

Tampoco debes desdeñar el poder de las redes sociales y de la fuerza que están adquiriendo. Es positivo estar en redes sociales como Tripadvisor y hacerte con comentarios positivos. También debes estar en otras redes sociales donde estén tus clientes y fomentar la conversación y la participación.

4.      Poner fotos de calidad

No escondas tu producto. Pon fotos bien grandes de las habitaciones, de tus servicios, de clientes satisfechos… Por supuesto que no estén ni distorsionadas ni pixeladas. El cliente, lo primero que quiere ver en las webs de hoteles es el producto.

5.      Y, que pueda reservar inmediatamente

Cuando tu cliente entre a tu página de inicio no tiene que ir de aquí para allá buscando cómo reservar en tu hotel. Lo ha de poder hacer directamente. En el proceso de reservas, cuantos menos datos le pidas mucho mejor. Así se agiliza el proyecto. Si no lo haces de esta manera lo más seguro es que se vaya a buscar una OTA donde reservar

6.      Cuida el posicionamiento

Tienes que ser capaz también de trabajar el posicionamiento. Es decir, hacer una búsqueda de palabras clave por las que te van a encontrar y crear contenido para ello. Por eso te interesa, después de actualizar la página de tu hotel, tener un potente motor de reservas y unos módulos que te permitan hacer contenido que posicione en Google.

Un sistema de reservas orientado a posicionamiento no es en absoluto caro. Puedes probar por ejemplo con Dispongo Cloud, que satisfará todas tus necesidades y que te permitirá controlar tanto las reservas online como las reservas que te hagan directamente

7.      Busca un diseñador

Y por último lo que queremos decirte es que busques un diseñador que se haga cargo de tu web y le dé un aspecto moderno, que atraiga a todos tus clientes. Repetimos: tu web es tu carta de presentación. Los errores de diseños son muy habituales. Si quieres evitarlos te aconsejamos que leas este post.

En definitiva. Que las webs de hoteles se han convertido en tu tarjeta de presentación y harías bien en cuidarlas para que los clientes no se lleven una mala impresión. Actualízalas y dales un nuevo diseño, además de incorporar métodos de pago seguro y orientarla al posicionamiento para que tus palabras clave vayan apareciendo en las primeras posiciones de Google.

¿Has actualizado recientemente la página web de tu hotel? Dínoslo en los comentarios.

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